Michael Jackson tenía "niveles letales" del poderoso anestésico Propofol cuando murió de un paro cardíaco, ya hace dos meses des la muerte, indicaron documentos divulgados ayer por la prensa estadounidense una declaración jurada que califica este caso como homicidio. El forense del condado de Los Angeles ya dictaminó que la muerte de Jackson fue un homicidio, un hallazgo que hace más probable que se formulen cargos penales contra el médico personal que estaba con el cantante cuando murió.
El forense determinó que Jackson recibió una combinación fatal de fármacos horas antes de morir en su mansión alquilada de Los Angeles el 25 de junio. Pruebas forenses encontraron el poderoso anestésico Propofol en el sistema del artista junto con otros dos sedantes.
Además del Propofol y dos sedantes, el informe de toxicología del forense encontró otras sustancias en su sistema, pero no se consideró que tuvieran relación con la muerte del cantante.
El doctor Conrad Murray, médico personal del cantante, había confesado en sus interrogatorios a la policía de Los Angeles que estaba tratando desde hacía seis semanas los problemas de insomnio de Jackson. El cardiólogo, que es objeto de una investigación por parte de la policía de Los Angeles por presunto homicidio sin premeditación, habría admitido que inyectó Propofol al artista.
"Murray indicó que Jackson estaba muy familiarizado con la droga y se refería a ella como la `leche`", escribió en la declaración jurada el detective del LAPD Orlando Martinez.
Murray le dijo a
los investigadores que le dio a Jackson una dosis de 25 miligramos de Propofol tras inyectarle durante la noche dos sedantes que no lograron hacerlo dormir. Tras la inyección de Propofol, Jackson logró dormir y el médico se ausentó para hacer unas llamadas telefónicas. Cuando regresó a la habitación el cantante no estaba respirando, intentó reanimarlo, llamó a los paramédicos, fue trasladado al hospital de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y allí fue declarado muerto.
La familia de Michael Jackson expresó su "plena confianza" en el proceso legal y "elogió los esfuerzos que están realizando en el Instituto de Medicina Forense, en la Fiscalía de Los Angeles y en el Departamento de la Policía de Los Angeles" en la investigación de la muerte del artista, horas después de relevarse que tenía "niveles letales" de un poderoso sedante. "La familia espera el día en que se haga justicia", concluyó el comunicado de el clan Jackson en Los Angeles.
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